viernes, 5 de diciembre de 2008

Memorias cruzadas III

Las pantallas gigantes desplegaban noticias en todos los idiomas. Alrededor de cincuenta canales distintos con informativos de todo el mundo se emitian a ciertas horas, entre los anuncios de fármacos contra el cáncer, ciberimplantes, cirugías exoesquelética y demás bebidas, patrocinadas por los jugadores de la liga de mechano-rugby.

Michael las observaba mientras recogía información de un data term, puestos de información de rutas, noticias, previsiones del tiempo y muchos datos a los cuales era fácil de acceder con la tarjeta DataT. Mientras la máquina cargaba, observó en una de las pantallas como se había producido un accidente a las afueras de la ciudad, en unos de los centros químicos. El resultado había sido doce muertos y nueve heridos, víctimas de unas nanomáquinas en construcción que prevenían la aparición del virus VIH. Su composión aún no estaba probada con los humanos y sus resultados fueron nefastos: taquicardias, convulsiones, vómitos y paracadas cardiorespiratorias fueron los responsables de la tragedia.

El periodistas negaba con la cabeza mientras volvía su atención al puesto de datos. Usando la pantalla táctil, se desplegó por varias ventanas y recuadros. Uno un archivo al que les costó acceder, pues la pantalla tenía una marca de bala. Los data term eran buenas cobertuas si no tenías nada mejor con lo que proteger tu pellejo. Tras varios minutos, se dió cuenta de que su tiempo de información llegaba al final, por lo que se apresuró a dar con lo que buscaba.

Eran recortes de periódico del año 2008. Con una memoria extraible subcutánea copió los archivos para poder trabajar con ellos con más tranquilidad. Finalmente, Michael recogió su tarjeta y siguió camino el trabajo.

Aquel día el tráfico era denso. El nivel de contaminación subía por momentos, anunciaban los paneles. Tendría que ir a algún centro O2, lugares donde se limpiaban los pulmones de gases tóxicos y demás compuestos que flotaban en el aire de los humanosm y de las máquinas.

- Si sigue así - dijo en voz baja para él - por muchas células en contra del envejecimiento, moriremos mucho antes, antes de nos haga efecto.

Y sacó su un cigarrillo para continuar con su marcha. El día era frio y grisáceo.

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